Detalle de Sismo

Sufrieron algunos desperfectos el Palacio de Gobierno, el teatro Degollado, la Penitenciaria, el Casino Jaliscience, Centro Mercantil, Arzobispado, Hotel Nuevo Mundo, Ciudad de París Teatro Principal, Telégrafos, Hotel Francés, entre otros. Algunas iglesias como el templo de Mezquitán, Capuchinas, San Francisco, San Felipe, San Juan de Dios, San José, Mexicaltzingo, la Universidad y otras capillas tuvieron danos. Algunas casas particulares se cuartearon y unas cuantas se desplomaron.
																
El Teatro Degollado estaba ocupado recientemente por una compañía de opera italiana, encabezada por el tenor Alessandro Bonci, de fama mundial, quien al sentir los temblores diurnos, canceló su contrato y esa misma tarde se fue a México […]
																
Fuertes ruidos subterráneos asociados a los sismos sentidos.
																
Una secuencia notable de sismos sentidos en una área relativamente pequeña, alrededor de la ciudad de Guadalajara, que se inicia el 8 de mayo y concluye el 1 de septiembre. En total hubo más de 1500 sismos de diversa intensidad.
																
Zapopan, Jal.
Tengo la honra de informar a esa Superioridad, que desde las seis de la mañana de ayer, hasta esta hora las nueve de la mañana, se han estado sintiendo muy continuados movimientos sísmicos, siendo de mucha intensidad el que se efectuó a las seis de la tarde de ayer. Hasta hoy no he tenido conocimiento de que se hayan registrado desgracias, únicamente cuarteaduras en casi todas las fincas [...] Zapotlán, mayo 9 de 1912. E. D. P. De la Torre.
AHJ,FFN, F.18-9122, F.227, E.3318(A).

Guadalajara, Jal.
El miércoles 8 de mayo de 1912, a las seis horas y treinta y seis minutos, se inició en el valle de Atemajac, principalmente en Guadalajara, una serie de más de mil quinientos temblores de tierra, oscilatorios y trepidatorios y de variada intensidad, que duró hasta el primero de septiembre del año mencionado. Según los geólogos locales, presbítero D. Severo Díaz, y D. José María Arreola, desde el día anterior, o sea desde el martes 7, los sismógrafos del Observatorio del estado, habían registrado movimientos iniciales, casi imperceptibles y que fueron aumentando, en el curso de la noche. Era Gobernador del estado, el ingeniero Alberto Robles Gil y la ciudad, aún pequeña y angosta. Diariamente, al rayar el alba, las calles se veían desiertas y las puertas cerradas y hasta antes de las siete horas, apenas transitaban algunas mujeres, que corrían a la primera misa que decían en las iglesias. Pero la calma provinciana, se sintió interrumpida al marcar el reloj las 6:36 en que los madrugadores escucharon un ruido subterráneo como si el centro de la tierra hubiera sido ametrallado y a continuación, el suelo en movimiento trepidatorio y breve, pero que azoró a quienes lo sintieron e hizo escuchar el crujido de los techos, a quienes estaban despertando. El estupor de los tapatíos, se convirtió en pánico al recordar el sismo terráqueo que se sintió en la madrugada del día en que Madero iba a entrar triunfante en la ciudad de México. Y recordaban también, el reciente paso por el cielo del profético cometa Halley. Y aún había quien se remitiera a las profecías de la Madre Matiana, que señalaba para esa era, calamidades sin cuento. El primer temblor de la tierra tapatía, fue rápido y fuerte, pues duró aproximadamente tres segundos. Pero la gente aún no se reponía de la sorpresa, cuando cinco minutos después, la corteza terrestre se sacudió de nuevo y desde entonces, siguió el bailoteo con intervalos de minutos, que fueron aprovechados por los ciento cincuenta mil habitantes de la ciudad, en vestirse rápidamente, salir a la calle, formar corrillos, comentar el instante y arrodillarse a cada nueva sacudida, para impetrar la ayuda del cielo. Los comercios, reguladores de la vida activa, abrían sus puertas a las nueve de la mañana, pero ese día faltaron muchos empleados y oficinas y despachos, se vieron poco concurridos de clientela. Las iglesias estuvieron llenas de fieles, constituyendo un serio peligro, pues a cada temblor, la muchedumbre se arremolinaba al buscar unos las puertas y otros a dedicarse a rezar y pedir misericordia. En el resto del día, siguió temblando con diferente intensidad. Los sismos más fuertes, oscilatorios o trepidatorios, eran precedidos de fuertes y perceptibles ruidos subterráneos, que parecían el desprendimiento de grandes moles que rodaban al centro de la tierra. Ya la gente veía aterrorizada que los muros de sus casas se cuarteaban y a cada movimiento intensivo, parecía que los techos iban a desplomarse [...] Ese primer día, los sismos más fuertes se sucedieron a las 11:45; 12:25; 14:46; 17:13, que fue la peor sacudida y 18:35, sumando hasta las primeras horas de la noche, un total de veintitrés temblores perceptibles. Al sentirse el cruel movimiento de las 17:13 y cuando las casas crujían, las gentes se arrodillaban llorando y rezando y todo era poseso de un terror pánico. Una mujer de la clase media, que transitaba por la esquina de Morelos y Santa Mónica y se llamaba María Isaac Vidriales, dio un grito terrible y azotó muerta en la banqueta, comprobándose después que padecía del mal cardíaco y la sorpresa, para ella, había sido terrible. El teatro Degollado, estaba ocupado recientemente por una compañía de ópera italiana, encabezada por el tenor Alessandro Bonci, de fama mundial, quien al sentir los temblores diurnos en su cuarto del hotel Francés, canceló su contrato y esa misma tarde se fue a México, alegando que tenía miedo, porque había sido testigo del desastre de la ciudad de Messina, también por los sismos y erupciones. Las ambulancias medias no se daban reposo en recoger víctimas de los ataques nerviosos. La autoridad, suspendió las funciones en los pocos cines que entonces había y eran el Olimpia, Verde, Rojo y Regio y los de barriada y se tomaron medidas para evitar las aglomeraciones en las iglesias. El padre don Severo Díaz, calculó que la serie de temblores en Guadalajara, duraría un mes aproximadamente y expresó que la sucesión de sismos, era igual a la que había azotado la ciudad en el curso del año de 1875, también provocados por la proximidad del volcán de Colima y que habían causado serios estragos. En el resto del citado mes de mayo, siguió temblando a diario [...] Los edificios públicos tapatíos, que sufrieron ciertos desperfectos entonces, fueron entre otros el Palacio de Gobierno, teatro Degollado, Penitenciaría, \'La Palma\', Casino Jalisciense, Centro Mercantil, Arzobispado, Hotel Nuevo Mundo, Ciudad de París, Teatro Principal, oficina de Telégrafos, hotel Francés y otros. Se clausuraron por su peligrosidad, los templos de Mezquitán, Capuchinas, San Francisco, San Felipe, San Juan de Dios, San José, Mexicaltzingo, La Universidad y varias capillas. Y amenazaron desplomarse las casas de las familias Brizuela, Cañedo y García; las ubicadas en Madero 285 y 287; Catalán 407; Medrano del 295 al 305 y las vecindades del Ave María y Libertad en Catalán. Algunas otras se desplomaron, siendo la primera ubicada en la calle Independencia 996, aunque sin ocurrir desgracias personales.
Camarena:88-91(B);Muñoz 1935:111(B).

Guadalajara, Jal.
Temblor “destructor”.
Figueroa 1963:119(B).

Zapotlán, Jal.
Tiembla, seguramente no fue muy de tomarse en cuenta ya que no señala nada que pueda escribirse.
Vizcaíno:59(B).
																
Total de Localidades que Registraron el Evento:
Coordenadas Registradas: Imprimir
12
11
10
9
8
7
6
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3
2
1